Concilio Internacional Jesucristo Soberano


1. Obras preparadas por Dios 2. Las ovejas obran por amor sin mirar lo que hacen las manos 3. Felices los que están instituidos en justicias 4. Sembradores alegres 5. Las obras buenas llenas de misericordia 6. Somos perfume de Cristo 7. Las obras buenas por agradecimiento 8. Ay de mí

 

 

LAS OVEJAS OBRAN POR AMOR SIN MIRAR LO QUE HACEN SUS MANOS

Capítulo II

“Y cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria. Y serán reunidas delante de él todas las gentes: y los apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a la izquierda. Entonces el Rey dirá a los que estarán a su derecha: Venid benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui huésped, y me recogisteis; desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; estuve en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos? ¿o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos huésped, y te recogimos? ¿o desnudo, y te cubrimos? Y respondiendo el Rey les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos pequeñitos, a mi lo hicisteis.” (Mateo 25:31-40)

Cuando Jesús menciona a las ovejas las declara suyas y conocidas por él, además las ovejas le siguen oyendo su voz porque le conocen como al buen Pastor. (Juan 10:11-15,27-29)

Nacieron ovejas, se desarrollaron como ovejas, vivieron como ovejas y nunca dejaron de ser ovejas para convertirse en cabritos desobedientes.

La única razón de su vivir era ser ovejas dependientes, con dueño y sustentador. Sin la dirección, cuidado y mantenimiento, perecerían de hambre, sed y en las fauces de un animal feroz.

Lo único seguro para las ovejas es seguir siempre al buen pastor que como su soberano dueño, no dejará que ninguna de ellas perezca en manos del ladrón hurtándolas, matándolas y destruyéndolas.

Las ovejas ya desde antes de nacer están programadas para que su comportamiento sea el de oveja, no el de paloma, becerro, perro, gato, etc. Oveja, siempre oveja. Así es con la nueva criatura hecha por Dios, ya está programada para que actúe como lo que es: un hijo o hija del Dios Alto.

Para que la nueva criatura u hombre interior pueda actuar de acuerdo a las obras que han sido preparadas de antemano, es necesario que esa nueva criatura sea vestida por el conocimiento para que sea renovada conforme a la imagen del que lo crió. (Colosenses 3:10)

Para andar en esas buenas obras que Jesucristo preparó, es necesario saber en su propia palabra cuales son para ejecutarlas.

El Apóstol Pablo recomienda: “La palabra de Cristo habite en vosotros en abundancia, en toda sabiduría, enseñándoos...” (Colosenses 3:16)

Miremos el consejo y enseñanza de Pablo cuando le escribe a Timoteo en su segunda epístola capítulo tres versículos desde el quince al diecisiete: “Y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salud por la fe que es en Cristo Jesús. Toda Escritura es inspirada divinamente y útil para enseñar, para convencer, para corregir, para instituir en justicia. Para que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente instruido para toda buena obra.” (2 Timoteo 3:16,17)

La Palabra de Cristo instituye en justicia y madura carácter, intenciones y bien hacer, para andar en las obras buenas Amados hermanos, reconciliaos con Dios, aumenten la fe que se les concedió por el estudio de la Palabra inspirada divinamente por el Espíritu Santo. De seguro que veremos la imagen del Hijo de Dios en cada una de nuestras vidas, habremos alcanzado su estatura y realmente Jesucristo será el primogénito entre muchos hermanos. (Romanos 8:29)

Bendecidos todos.