¿Es el Diezmo Pre-Mosaico?

 

Ahora vamos a tratar la enseñanza que dice que el diezmo Bíblico era pre-Mosaico.

El primer lugar donde encontramos ofrendas de cualquier género está en Génesis 4:3-7. Caín trajo una ofrenda del fruto de la tierra al Señor y Abel trajo las primicias y las mejores ovejas de su rebaño. El Señor acepto la ofrenda de Abel, pero no acepto la ofrenda de Caín, lo cual lo enfureció

La mayoría de los Cristianos que enseñan a diezmar, se consideran literales en la interpretación Bíblica, es decir no espiritualizan la Escrituras. Sin embargo cuando tiene que ver con algunos de sus versículo doctrínales, rápidamente abandonan el literalismo y espiritualizan.

En Génesis 4:3, el pasaje arriba mencionado, no hay indicio con respecto a la cantidad ofrecida. Ambos, fruto de la tierra y parte del rebaño son ofrendas aceptables. Uno podría indicar que Abel trajo sangre y Caín no. Podríamos quizás decir que Abel dio de sus "primicias" mientras nada se dice sobre el ofrecimiento de Caín. Podríamos intentar "espiritualizar", pero si dejamos la Escritura permanecer como está con una interpretación "literal", no tenemos aquí un "Diezmo Bíblico". Tenemos dos ofrendas; una aceptada y la otra no.

Abraham

Tenemos que viajar 2000 años en la historia para encontrar otro rastro de ofrenda al SEÑOR. Venimos a Abraham y su ofrenda a Melquisedec, el rey de Salem. Quiero hacer énfasis en un punto cuando analicemos esta porción de la Biblia. Como dije antes, los literalitas no son muy literales. Si la comprensión de la verdad "espiritual" viene desde un enfoque "literal", entonces Escrituras como la siguiente no tiene mucho sentido: “Pero el hombre natural no acepta las cosas que son del Espíritu de Dios, porque le son locura; y no las puede comprender, porque se han de discernir espiritualmente.” (1Corintios 2:14) Si se puede entender la Biblia con la mente natural que usa un enfoque literal de la Escritura, entonces el versículo precedente no es cierto. El hecho es, que las Escrituras y las cosas de Dios necesitan ser "discernidas espiritualmente". Son "locura" para la "mente natural". Los Cristianos igualmente pueden ser considerados carnales, con mentalidad carnal. 1Cor 3:1 “Y yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niñitos en Cristo.”

Algunos cristianos, mientras sostienen ser literales, quitan o añaden a las Escrituras para hacer que se ajuste a sus doctrinas, eso es muy carnal. En la próxima porción de la Escritura que miremos pondré esto de manifiesto.

Algunos dice que no estamos bajo la Ley de Moisés, los Cristianos, somos hijos de la fe y el padre de la fe es Abraham. (Hasta ahora están bien.) Luego viene el pequeño paso carnal que muestra que tan no literales, son los literales. Ellos dicen que Abraham fue un diezmador y por lo tanto debemos ser diezmadores. Bien, permítanos ser literales por un momento y miremos lo que la Biblia "literalmente" dice en el Capítulo 14 de Génesis donde se describe la batalla entre nueve reyes, cinco contra cuatro. La primera parte del Capítulo 14, es muy difícil de comprender.

La versión de la Biblia King James no nos lo dice, pero la Biblia Judía llamada el Tanakh (que es el Antiguo Testamento) nos cuenta que algunos de los significados del Hebreo en este Capítulo son imprecisos. (Parece que las Judíos son más honrados en sus traducciones que algunas traductores Cristianos de la Biblia.)

Abram con 318 de sus hombres fue tras los cuatro reyes que saquearon al rey de Sodoma y al rey de Gomorra. Abram derrotó a los reyes, y liberó a su sobrino Lot.

Al volver con todos los despojos de guerra, el rey de Sodoma se encontró con Abram en el valle del Rey. Aquí un misterioso rey de Salem, sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino y bendijo a Abram. Abram entonces le dio el diezmo de todo el botín de guerra a Melquisedec.

En este momento, el rey de Sodoma le dice a Abram que tome todos los bienes excepto las personas. No está claro en el texto de quien son las persona y los bienes involucrados aquí. Los ejércitos que Abram derrotó habían atacado otros reinos antes de saquear a Sodoma y Gomorra. Cuando Abram los derrotó, debió haber recogido una cantidad tremenda de riquezas y personas que podían ser convertidas en esclavos.

Una cosa está clara en este pasaje, estos "bienes" o despojos no eran propiedad de Abram. Pertenecieron a otros reinos que fueron derrotados por los reyes anteriormente mencionados. El reparto de todos los "despojos de guerra" y de las personas no está completamente claro. ¡Una de cosa sin embargo está clara, Abram no se guardo nada! Además, no hay referencia en la Biblia de que Abram diera al rey de Salem alguna otra cosa, ninguna otra vez. En otras palabras, no hay tradición anterior ni antecedente a este suceso de "diezmar" al rey Melquisedec.

¡Además, no existe el mandato en ninguna parte de la Biblia que otorgue el derecho a ningún humano para ponerse a sí mismos en el lugar del sacerdocio de Melquisedec para exigir los diezmos al pueblo de Dios! El salto desde este evento a la tradición moderna de hoy en día de ofrendar los diezmos al pastor o a la cabeza de una organización, afirmando que esto cumple lo expuesto en Génesis, va más allá del literalismo y más allá de la espiritualización. No se quedan cortos a la hora de torcer la Biblia para su propia ganancia.

Otra cosa, la esclavitud era parte de la vida en esta región, y los despojos de guerra incluían personas. ¿Diezmamos nosotros los enemigos capturados cuando nuestras naciones van a la guerra?

El rey de Sodoma le dijo a Abram que se podía guardar todas las mercaderías, él simplemente quería a la gente. No está claro a que gente se refería él. Podemos presumir que él se refería a sus propios ciudadanos capturados, pero esto es una mera conjetura.

Hay muchas preguntas que pueden hacerse sobre este misterioso pasaje, pero hay también algunos puntos muy claros. Abram dio un décimo de estos despojos de guerra a Melquisedec. Si el punto aquí es el diezmo, entonces Abram tuvo todo el derecho de guardarse el resto, pero Abram lo devolvió todo. Usó una parte para alimentar su ejército y permitió que tres hombres guardaran su parte. Abram no dio un "diezmo total" del 10%. ¡Abram lo dio todo!

“No tomaré ni un hilo, ni la correa de un calzado, nada de todo lo que es tuyo, para que no digas después: "Yo enriquecí a Abram." (Génesis 14:23)

No hay nada aquí que nos indique que Abram dio una décima parte de sus posesiones personales. Abram dijo: “No tomaré nada de todo lo que es tuyo” Esto muestra que él no diezmó de sus posesiones personales. Se debe notar también, que estos despojos fueron a este rey misterioso de Salem, no al pastor, o a la oficina principal de una denominación, etc. No hay registro bíblico de que Abram hiciera esto de nuevo. Nada hay en la Biblia hasta este punto que indique que Dios quisiera un décimo de todo lo que uno poseyera. Si Él lo hubiera querido, simplemente lo hubiera ordenado, pero no lo ordenó. Abram ofreció voluntariamente una ofrenda-libre de despojos de guerra a un rey misterioso.

Si nosotros tomamos pasajes de la Biblia tal como el anterior, que describe un suceso que ocurrió hace millares de años en culturas totalmente diferentes a las nuestras hoy en día y decimos que deberíamos hacer las mismas cosas, entonces debemos ser consecuentes. ¿Por qué escoger y elegir esos versículos de la Escritura que atraen a nuestras pequeñas mentes carnales? Tomar esta Escritura literalmente significa que todos moriremos de hambre. ¡Acabamos con nada! Mas aún, si seguimos el ejemplo de Abram literalmente, deberíamos estar dándole mucho más de nuestras ganancias al rey de Sodoma! Obviamente, algo más esta ocurriendo aquí aparte de lo qué la tradición nos ha enseñado.

No debemos tomar tradiciones culturales de generaciones pasadas y aplicarlas al día de hoy simplemente porque están en la Biblia. Abraham tomó varios animales y los partió por la mitad cuando hacía un pacto con Dios. ¿Por qué no hacemos lo mismo en nuestra cultura moderna? ¿Por qué los maestros del diezmo son tan selectivos sobre qué tradiciones antiguas poner sobre los hombros del pueblo de Dios? Supongo que los cheques en el plato de las ofrendas son más deseables y menos sucios que pedazos de animales en el altar o en el plato de las ofrendas. Solo porque la Biblia muestra una práctica hecha hace miles de años, no es razón suficiente para continuarla hoy en día. Debemos dividir correctamente la Palabra de Dios.

Hay otro ejemplo del pueblo de Dios recibiendo despojos de guerra, del cual sacaron "ofrendas" para los sacerdotes. ¿Hallaremos este acto consistente con lo qué Abram hizo? Miremos ese suceso.

En el Capítulo 31 de Números, Israel "tomó venganza para el Señor sobre Madián. (Números 31:3) Doce mil Israelitas fueron a la guerra contra Madián. Primero, ellos mataron a todos los varones. Olvide los Acuerdos de Paz de Ginebra sobre el trato apropiado a los prisioneros. Mátelos a todos!! ¿Recuerda como nos sentíamos cuando nuestras tropas eran tratadas de esa manera en la guerra? ¡Ultrajados!

Luego tomaron a las mujeres y a los niños cautivos y los llevaron con el resto del botín, a Moisés, al sacerdote Eleazar y al resto de la congregación. Algunos ministros estarían orgullosos de una congregación como ésta, pero Moisés se enojo con ellos. “Por qué habéis dejado con vida a todas las mujeres? He aquí por consejo de Balaam ellas fueron causa de que los hijos de Israel prevaricasen contra Jehová en lo tocante a Baal-peor, por lo que hubo mortandad en la congregación de Jehová. Matad, pues, ahora a todos los varones de entre los niños; matad también a toda mujer que haya conocido varón carnalmente, pero a todas las niñas entre las mujeres, que no hayan conocido varón, las dejaréis con vida.” (Números 31:15-18)

Ahora podríamos hablar acerca de este pasaje de la Escritura por días y no acabaríamos, así que no analizaremos éste incidente más allá de su relación con el diezmo. No es necesario decir que cualquier ministro que quisiera poner en acción esta orden, terminaría en la cárcel o en la silla eléctrica.

Una simple mirada al Nuevo Testamento para ver como Jesús trató con pecadores Gentiles, dará luz para ver la diferencia entre la “Ley del Espíritu de vida en Cristo” y la Ley de Moisés. ¿Qué hizo Jesús con la mujer Samaritana que tuvo cinco hombres y vivía con un sexto que no era su esposo? ¿La apedreo? ¿Y con la mujer que fue cogida en el mismo acto de adulterio? ¿Tiró Jesús la primera piedra? Jesús nunca ordenó que se matara a nadie! Moisés sí. ¿Cómo debemos los Cristianos tratar a nuestros enemigos? ¿Podría usted como Cristiano matar bebés, niños y mujeres que no sean vírgenes si su gobierno o su pastor se lo ordena? ¡Espero que no! Estos ejemplos y muchos más a través de los libros erróneamente llamados “El Nuevo Testamento” debería revelarnos que el Nuevo Pacto y el Antiguo Pacto son radicalmente diferentes.

“Toma la cuenta del botín que se ha hecho, así de las personas como de las bestias... y partirás por mitades el botín entre los que pelearon, los que salieron a la guerra, y toda la congregación.” (Números 31:26-27) Como vemos las personas eran contadas como botín. Luego el botín fue dividido entre los que fueron a la guerra y los que no fueron. De esos despojos se dio una ofrenda, Aquellos que fueron a la guerra tuvieron que dar al sacerdote Eleazar una de cada quinientas personas, ganado, burros y ovejas. Los que no fueron a la guerra, tuvieron que dar a los Levitas, una de cada cincuenta personas, ganado burros y ovejas.

Contrario a la ofrenda de Abraham a Melquisedec, una buena parte del botín tuvo que ser sacrificado. Luego ellos tuvieron que dar dos - diezmos del uno por ciento al sumo sacerdote. Los que no lucharon tuvieron que dar el 2% a los Levitas (ministros) ¿Si el diezmo era como se predica hoy, o como el incidente de Abraham, por qué esta historia contradice totalmente esta "ley" si el 10% fuera basado en la práctica de entonces? ¿Por qué los que enseñan el diezmos no hacen referencia a ésta Escritura y la estandarizan como base para el dar? ¿O es porque el 10% es mucho más que el 2% o dos diezmos del 1%? Estas fueron órdenes dadas por Dios a Moisés. (Números 31:25) Son palabras de Dios escritas en la Biblia. ¿Por qué los maestros del diezmo evitan referirse a éste pasaje de las Escrituras?

Primero que todo, esto contradice totalmente sus enseñanzas. Más aún, revela algunos aspectos de la Ley de Moisés los cuales ellos prefieren que los laicos no los estudien profundamente. Cuando el Cristiano verdaderamente empieza a ver la diferencia entre el Antiguo Pacto y el Nuevo Pacto, son descubiertos los falsos ministros quienes usan porciones del Antiguo Pacto para esclavizar al pueblo.

Debemos seguir. Pero quiero anotar que esta porción de las Escrituras está llena de verdades espirituales que la "mente literal” nunca será capaz de comprender. Toda la Escritura debe discernirse espiritualmente.

¿Por qué los que enseñan el diezmo no practican también la esclavitud, y la matanza de mujeres y niños? Tal vez lo hacen, pero la mayoría de ellos no se dan cuenta de que son esclavos de un sistema, que pone cargas sobre el pueblo de Dios, cargas que Él nunca puso sobre sus hombros. Pocos Cristianos son conscientes de que están muertos espiritualmente, hasta que salen de los cementerios donde rinden culto.

Habiendo sido parte de algunas iglesias, me asombraba saber en cuántas ocupaciones estaban involucrados los Cristianos, ocupaciones que violaban claramente las leyes del Antiguo Pacto y el espíritu del Nuevo Testamento. Sin embargo no encontré ministros que rechazarán éste dinero aún sabiendo su procedencia. Pase algunas semanas leyendo leyes específicas y los castigos por infringirlas, luego trate de introducirlas en la sociedad actual. Simplemente no funciona. Recuerde, la Ley Mosaica es un contrato que no se puede romper borrando ciertas ordenanzas, ritos o mandamientos. Debe guardarse toda para poder recibir los beneficios prometidos por Dios para aquellos que guarden el pacto. Más aún, éste fue un pacto nacional. El pecado de una sola persona afectaba a toda la nación. Por favor piense bien, es importante entender esto.

Resumiendo “Despojos de Guerra”

Hemos visto dos formas diferentes de cómo se repartieron el botín de guerra. Se debe señalar que este suceso de Abram fue con anterioridad al pacto que Dios hizo con él. El Pacto Abrahámico está en el Capítulo 15 de Génesis. El diezmo de los despojos dados a Melquisedec está en el Capítulo 14. Si Dios hizo una ley en que el 10% de los despojos de guerra pertenecen a Él, entonces debe haber cambiado la ley en el Capítulo 31 de Números. Pero Dios nunca cambia nada. El hecho es que nunca existió una ley que demandará el 10% de los ingresos ni antes ni después de Abraham, ni antes ni después de Moisés, ni antes ni después de Jesús, o antes o después de todos ellos. No ha existido nunca, excepto por parte de pastores mentirosos o ignorantes, que exigen para sí mismos en el nombre de Dios, lo qué Dios nunca les ha dado el derecho de tomar.

El Pacto Abrahámico

La ratificación de lo que llamamos el Pacto Abrahamico, o, el Pacto de Fe, la encontramos el Génesis 15. No se halla ni una palabra sobre el diezmo. Abram trajo: una becerra de tres años, una cabra de tres años, un carnero de tres años, una tórtola y un palomino. Los corto a todos por la mitad excepto los pájaros, ahuyentaba a las aves de rapiña y se quedó dormido. Luego “Sucedió que puesto el sol, se veía un horno humeando, y una antorcha de fuego que pasaba por entre los animales divididos” (Génesis 15:17) Aquí vemos la ratificación del Pacto Abrahamico. Dos luces pasaban por entre los animales mientras Abraham dormía. Aquí está el Pacto de Fe... todo de Dios. El hombre duerme. El hombre nunca puede entrar en un pacto con Dios porque siempre lo rompe. Dios dio la Ley Mosaica para probar esto. Por eso en el Pacto Abrahámico, vemos un acuerdo hecho solo entre uno, Dios con él mismo, mientras Abraham dormía. No hay diezmo aquí.

Jacob

Volvamos a nuestra búsqueda del diezmo en el Antiguo Testamento, vemos que la palabra diezmo se encuentra en Génesis 28:20-22: “Jacob también hizo un voto diciendo: --Si Dios está conmigo y me guarda en este viaje que realizo, si me da pan para comer y vestido para vestir, y yo vuelvo en paz a la casa de mi padre, Jehová será mi Dios. Esta piedra que he puesto como memorial será una casa de Dios, y de todo lo que me des, sin falta apartaré el diezmo para ti.”

Jacob, el nieto de Abraham, pasó la noche a un lugar llamado Luz (árbol de almendra). Tuvo un sueño increíble en que Jehová reafirmó la promesa que hizo con Abraham. Jacob ungió la piedra donde reposó su cabeza cuando durmió y llamó el lugar Bethel, que significa "casa de Dios". En este punto, Jacob trató de hacer un negocio con Dios. Lo qué vemos aquí, es típico de Jacob, si me beneficio - entonces doy.

Si Abraham había enseñado a sus hijos el diezmo, entonces Jacob no tenia que tratar de hacer un negocio con Dios. Si me das todo lo que quiero, yo te devolveré el 10%. Jacob, hace una promesa condicional a Dios, si me beneficio - entonces doy. No hallamos a Dios contestando a Jacob. (Jacob también llamó a una piedra que él untó con aceite la "casa de Dios.") ¿Es esa piedra la "casa de Dios"? Si vamos a ser literales, entonces permítanos ser consecuentes. O la piedra es la "casa de Dios," (o Jacob aún tenía que crecer espiritualmente.)

Mientras encontramos a Jacob jugando a "hagamos un trato," con Dios, no hallamos ni un solo pasaje en la Biblia que declare que el trato se hizo o que el trato pasara a su descendencia. El hecho de que él tratara de negociar con Dios no tiene nada que ver con nosotros, excepto por el hecho de que muchos de nosotros parecemos tener la misma naturaleza de Jacob y parece que jugamos a los mismos juegos con Dios que Jacob jugó. Hay muchas verdades que podemos aprender de Jacob quien un día llegara a ser Israel, pero diezmar es algo que no podemos aprender de él. No hay nada escrito donde Dios le haya ordenado el diezmo, no hay nada escrito que demuestre que él lo hizo.

José

Si hubo una oportunidad concluyente de Dios para mostrarnos que estaba interesado en el 10% de los ingresos brutos, con José tuvo una ocasión perfecta de dejarlo absolutamente claro. Si usted recuerda, José interpretó un par de sueños que pronosticaban 7 años de buena cosecha seguidos por 7 años de hambre. José, “un hombre en quien estaba el Espíritu de Dios” (Génesis 41:38) dijo al Faraón que recaudara un quinto del grano en los 7 años de abundancia para sustento durante los 7 años de hambre. Estoy seguro que hay grandes verdades que podemos escudriñar en el Capítulo 47 de Génesis pero debemos seguir con el tema del diezmo.

Como el hambre aumentó, José vendió grano a los que vivían en Egipto y Canaán, hasta que José recaudó todo el dinero que se halló en la tierra de Egipto y en la tierra de Canaán. El hambre continuó. Los Egipcios entonces vendieron todo su ganado a José. Al final de ese año vinieron a José nuevamente. En este tiempo compró sus tierras y sus mismos cuerpos a cambio de comida. A estas alturas, el Faraón gracias a la administración de José, poseyó todo en Egipto exceptuando la tierra de los sacerdotes. El Faraón les había dado gratuitamente comida a lo largo de todo este tiempo y por eso no vendieron sus tierras.

José tuvo en ese momento de la historia, una oportunidad perfecta para crear un sistema económico perfecto. ¿Qué hizo él? ¿Instituyó un "diezmo"?

Después de todo, si diezmar era un mandato de Dios en el sistema patriarcal, aquí tuvo José la oportunidad perfecta para establecer el sistema en todo Egipto. Después todos los descendientes de José iban a pasar los próximos siglos en Egipto. Tuvo una oportunidad perfecta de crear un ambiente en el que Jehová los bendijera y no los maldijera. Entonces, ¿Estableció un diezmo del 10% de los ingresos brutos o netos? ¡No! José primero que todo no devolvió al pueblo Egipcio sus posesiones. El capitalismo estaba descartado. Les dio semillas para que sembraran en la tierra que ahora pertenecía al Faraón. Entonces, de la cosecha de las semillas dadas por el gobierno, el 20% fue para el Faraón como era su deseo. A los ciudadanos de Egipto se les permitió que se quedaran con el otro 80%. El pueblo permaneció sirviendo al Faraón.

“Entonces José instituyó como ley en la tierra de Egipto, hasta el día de hoy, que la quinta parte pertenece al faraón. Solamente la tierra de los sacerdotes no llegó a ser del faraón.” (Génesis 47:26)

Se debe señalar que no hay ni un sólo indicio en la Biblia de que durante el tiempo que Israel paso en Egipto estuviera bajo un sistema diferente al que José estableció. Para los que ven tipos y sombras en el Antiguo Testamento, muchos ven en José (significa “Él añade”) como un arquetipo de Jesucristo. Hay muchas cosas que aprender aquí, pero el diezmo no es una de ellas.

Ahora, un 20%, es un impuesto razonable y probablemente saludable para garantizar el funcionamiento de un gobierno. La mayoría de los países de esa época no estaban estructurados como los gobiernos de hoy. Los que enseñan el diezmo, no nos dicen que no existía tal cosa como la separación entre la iglesia y el estado en esa época de la historia. Los reyes y Faraones eran reconocidos frecuentemente como dioses. Esos reinos eran teocracias. Lo qué el rey cobraba al pueblo podía usarse para cualquier cosa desde construir caminos, pagar maestros, hacer guerras, o edificar templos. Como dije, no había separación entre iglesia y estado.

Lo qué José estableció, nos guste o no, era un sistema económico que prohíbe la propiedad privada de la tierra, con un impuesto del 20%. No olvide, que el Espíritu de Dios estaba en él.

No encontramos un 30 a un 40% de impuestos para el gobierno, y después el diezmo, un 10% más para los sacerdotes (pastores) ¡José no instituyó un diezmo del 10% de todo porque Dios no lo requirió! El Faraón, sin embargo, necesitó recaudar los impuestos para que el gobierno funcionara.

Con esto termina cualquier versículo que tenga relación acerca de lo qué nosotros hemos llamado diezmo, con anterioridad a la institución de la Ley Mosaica. Claramente, si Dios instituyó un 10% como el diezmo con anterioridad a Moisés, o los personajes Bíblicos lo ignoraban, o Dios no lo dejó muy claro. La verdad es que Él nunca lo exigió o sugirió.

Continúa...